jueves, 4 de agosto de 2011

Trabajo de verano.


Hola de nuevo a los poquitos que me leéis o me seguís ocasionalmente.
Después de estar tan desaparecida a causa de exámenes y el echo de que no tenía nada que poner el mi blog, he estado ausente hasta el punto de parecer que me había muerto o perdido en el mundo.
Pues no. Sigo aquí.

El mes de agosto, me han cogido para monitora de tiempo libre en un cole de verano, de un pueblo de aquí cerca. No hace falta decir que mi ilusión fue grande, pues creí que no encontraría un trabajo más serio del que ya tenía (cuidando a la nena de una vecina).
Y no solo por el echo de que encontré un trabajo con el que por primera vez me hacen contrato, sino que también es por lo que disfruto yo trabajando de monitora.

Cuando en mis tiempos mozos realicé las prácticas (no remuneradas) en el colegio de mi pueblo, fue una grandísima experiencia que nunca olvidaré. Trabajé con varias amigas y compañeros con los que realicé el curso de monitora, y con gente trabajadora y divertida.
Aquel verano, fue genial básicamente por que sentía que yo era una nena más en el cole de verano.
Y este año, trabajando (eso sí, ya como una profesional con mi título de monitora y de forma remunerada) es igual de genial que en mis prácticas. Es incluso mejor, pues facetas como ser severa, en mis prácticas no lo tuve, sin embargo ahora si me enfado, me enfado y castigo al nene si lo merece. Antes, pues como que me daba reparo.
Eso era algo que quería modelar y eso estoy haciendo.
Los niños y las niñas, son todos unos cielos, pero siempre están los pillos de turno, que este año tienen el nombre de Marc, Joan Albert, Josep y Javi, en mi grupo (de nuevo trabajo con los medianos). Las nenas son todas unos cielitos, y algún que otro nene es todo un amor, y para que voy a mentir tengo un par de preferidos, jeje.
Pero si se les riñe o se les premia, a todos por igual.


En cuanto a compañeros de trabajo, son serios y se toman su trabajo en serio. Amigables y muy agradables y nos lo pasamos bien entre nosotros, por lo que hay muy buen rollo.

Pero claro, no todo es maravilloso, y fantástico... Tenemos varios niños que son casos de asuntos sociales, y bueno, uno de ellos para que os hagáis una idea, es la de un niño de 11 años que toma antidepresivos y padece ataques de ira. Casi todos los casos son problema de los padres por lo que hablamos con las asistentas sociales y ello pues me quemó un poco realmente. No me entra en la cabeza que chiquillos tan pequeños tengan que sufrir las consecuencias de las negligencias y personalidades despreocupadas de los padres.
Me sienta mal y me cabrea, y me frustra en mi trabajo. Y es que me dicen que me aferro emocionalmente a lo que hago, pero soy así, a algo que me gusta pongo cuerpo y alma, para que me agrade, me salga bien y disfrute yo y los que me rodean. Hay que darlo todo, por que así acabas adquiriendo mucho más (no me refiero a algo material).


En fin, ese es mi trabajo de verano, a parte de cuidar entre mi hermana y yo la nena de la vecina, pues no encontró a nadie para sustituirme. Y este es mi verano. Trabajo, estudios y amigos.
Nada de amores de verano. Eso es para adolescentes. Además, prefiero estar alejada una temporada de lo que significa querer a alguien.

Bueno, pues a seguir con el día a día!
Un abrazo muy fuerte!!!
=)

Carol.

1 comentario:

  1. ¡Oh! Me alegro mucho por ti, espero que no te den mucho la lata.
    Yo,que he sido profe de francés durante el último trimestre escolar... he tenido a cada uno que ¡ofú! y otros que aiiins, me los comía.

    Un beso
    http://mirianasworld.blogspot.com/

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